¡Hola a todos, amantes de los negocios inteligentes y las finanzas optimizadas! ¿Alguna vez te has preguntado cómo hacer que tu empresa rinda al máximo sin desangrarte con los gastos?
¡Pues claro que sí! Yo también, al igual que muchos emprendedores, me volví un poco loco al principio intentando descifrar el laberinto de los impuestos y los vehículos de empresa.
Recuerdo perfectamente las horas que pasaba buscando información fiable sobre el renting y el leasing, porque al final, todos queremos lo mismo: tener ese coche que nos impulse hacia adelante, pero sin que Hacienda nos dé un susto.
Es fascinante ver cómo las opciones de movilidad para empresas han evolucionado, y ahora, más que nunca, el renting y el leasing se presentan como auténticos salvavidas fiscales.
De hecho, ¡estamos en un momento crucial! Las tendencias para 2025 apuntan a una mayor flexibilidad y beneficios para quienes saben jugar bien sus cartas con el arrendamiento de vehículos, sobre todo con la creciente apuesta por coches más sostenibles.
Conozco de primera mano la importancia de cada euro en un negocio, y por eso, hoy quiero compartirles lo que he aprendido y aplicado para que ustedes también puedan sacarle el máximo partido a estas herramientas.
En definitiva, no se trata solo de tener un coche, sino de tenerlo de la forma más inteligente y rentable posible. ¿Están listos para descubrir todos esos secretitos que harán que su contabilidad sonría?
¡Acompáñenme para descubrirlo todo en el artículo de hoy!
Descifrando el Arrendamiento de Vehículos: ¿Renting o Leasing?
Más Allá de los Nombres: Entendiendo las Diferencias Clave
¡Amigos emprendedores! La primera vez que me topé con los términos “renting” y “leasing”, sentí que me hablaban en chino. Parecía lo mismo, pero en el fondo, sabía que había matices importantes que podían marcar una gran diferencia en mis finanzas. Después de investigar y, sobre todo, de probar ambas modalidades con diferentes vehículos para mi equipo, puedo decirles que la clave está en el propósito final y la flexibilidad que buscas. El renting, para mí, es como tener un coche “sin preocupaciones”. Pagas una cuota fija mensual y te olvidas de casi todo: mantenimiento, seguro, impuestos, averías… ¡hasta los cambios de neumáticos! Es ideal si no quieres complicaciones y necesitas renovar tu flota con cierta frecuencia. Es una cuota pura de servicio. En cambio, el leasing es más bien una financiación encubierta. Piensa en ello como un “alquiler con opción a compra”. Desde el día uno, sabes que ese coche, si todo va bien, puede ser tuyo al finalizar el contrato tras pagar un valor residual. Es una opción que valoro mucho cuando tengo claro que el vehículo se va a integrar de forma permanente en los activos de mi empresa a largo plazo. La elección correcta no solo afecta tu flujo de caja, sino también cómo se ve tu balance a ojos de Hacienda, y eso, ¡es oro puro!
Mi Experiencia Personal: ¿Cuándo Elegir Cada Opción?
Recuerdo perfectamente cuando mi empresa necesitaba un par de furgonetas para reparto. Al principio, me decanté por el renting porque la previsión era de un uso intensivo durante tres años y luego cambiarlas por modelos más eficientes. La comodidad de no tener que preocuparme por el seguro o las revisiones fue un auténtico alivio. Las llamadas al taller, las gestiones de papeles… ¡todo cubierto! Esto me permitió centrarme en lo que realmente importa: hacer crecer mi negocio. Sin embargo, cuando llegó el momento de adquirir un coche de dirección, un modelo más exclusivo que sabíamos que usaríamos durante muchos años y que queríamos que fuera un activo de la empresa, el leasing fue la solución perfecta. Me permitió desgravar el IVA y amortizar el bien, lo cual tuvo un impacto positivo en la cuenta de resultados. Cada opción tiene su momento y su razón de ser. No hay una respuesta única y universal, sino la que mejor se adapte a tus circunstancias específicas. Lo que funciona para un negocio de consultoría no es lo mismo que para una empresa de logística. ¡Esa es la belleza de la flexibilidad financiera que tenemos hoy!
Ventajas Fiscales que Harán Sonreír a tu Contable
El Impacto Directo en la Declaración de la Renta de tu Empresa
Si hay algo que aprendí muy rápido como emprendedor es que, al final, cada euro cuenta, y más aún cuando hablamos de impuestos. Las ventajas fiscales del renting y el leasing son, sin duda, uno de los principales atractivos y, créanme, ¡no son pocas! Para el renting, la cuota mensual se considera un gasto deducible al 100% en el Impuesto de Sociedades o en el IRPF para autónomos, siempre y cuando se demuestre que el vehículo está afecto a la actividad empresarial. Esto significa que si tu empresa paga 500 euros de renting al mes, esos 500 euros reducen la base imponible sobre la que se calcula tu impuesto. ¡Es una maravilla! Además, y esto es clave, puedes deducirte hasta el 100% del IVA de esas cuotas de renting si el coche se usa exclusiva y totalmente para tu actividad profesional. Sé que suena a fantasía, pero es una realidad. Es una forma muy inteligente de reducir la carga fiscal y mejorar la liquidez de tu negocio. Después de años aplicando esto, te aseguro que se nota la diferencia en los números finales.
Optimizando el IVA y Otros Tributos con el Arrendamiento
El juego del IVA es otro campo de batalla donde el renting y el leasing se lucen. Con el renting, como ya mencioné, la deducibilidad del IVA puede llegar hasta el 100% si el vehículo es de uso exclusivo profesional, algo que siempre hay que poder justificar ante una inspección. Para los coches que tienen un uso mixto (profesional y personal), la deducción general es del 50%, pero, con una buena justificación, se puede llegar a deducir un porcentaje mayor. En el caso del leasing, la deducibilidad del IVA también es posible, y además, al ser un contrato de financiación, las cuotas de amortización del capital y los intereses también son deducibles en el Impuesto de Sociedades. Es como tener un doble beneficio fiscal. Recuerdo un año en que, gracias a una buena planificación con vehículos en leasing y renting, conseguimos una devolución de IVA inesperada que nos dio un respiro enorme. No es magia, es simplemente conocer y aplicar las reglas del juego fiscal a tu favor. Siempre recomiendo tener un buen asesor que te ayude a navegar estas aguas, porque cada caso es un mundo.
Elige con Sabiduría: Factores Clave para tu Decisión
Analizando tu Flujo de Caja y Proyecciones a Futuro
Cuando te enfrentas a la decisión entre renting y leasing, lo primero que me pregunto es: ¿Cómo está mi flujo de caja? Y, más importante aún, ¿cómo espero que esté en los próximos 3 a 5 años? Si tu empresa valora tener predictibilidad en los gastos mensuales, sin grandes desembolsos iniciales ni sorpresas con averías, el renting es tu amigo. Las cuotas son fijas y lo incluyen casi todo, lo que te permite tener una visión muy clara de tus costes de movilidad. Esto es crucial para la planificación financiera y para evitar sustos que desequilibren tus cuentas. Si, por otro lado, tienes una proyección de crecimiento estable, una buena capacidad de financiación y la intención de mantener el vehículo a largo plazo como un activo de la empresa, el leasing puede ser más interesante. Te permite una amortización fiscal y, al final del contrato, la posibilidad de adquirir el bien por un valor residual, lo cual puede ser una excelente estrategia de inversión a largo plazo. He visto negocios estancarse por una mala previsión de tesorería, y créanme, la elección del vehículo es una parte importante de esa ecuación.
Tipo de Vehículo y Uso: La Clave para un Acierto
No es lo mismo necesitar una flota de vehículos comerciales para reparto intensivo que un coche de alta gama para la dirección de la empresa. El tipo de vehículo y el uso que le vayas a dar son factores determinantes. Para vehículos que van a tener un alto kilometraje, un desgaste considerable o que se necesitan renovar cada pocos años por cuestiones de imagen o tecnología (como los vehículos eléctricos que están en constante evolución), el renting suele ser la opción más práctica y económica a largo plazo. Te permite estar siempre a la vanguardia sin la preocupación de la depreciación o la venta de un activo obsoleto. En cambio, si el vehículo es una inversión a largo plazo, con un uso más específico y donde la imagen de propiedad es importante, el leasing puede encajar mejor. Pensemos en un arquitecto que necesita una furgoneta específica para transportar materiales voluminosos y que la quiere “suya” a largo plazo, o un directivo que valora tener un coche de alta gama en propiedad después de unos años. Cada situación tiene su solución ideal, y lo importante es no dejarse llevar por la primera oferta, sino analizar bien tus necesidades reales.
Beneficios Operacionales: Más Allá de los Impuestos
Gestión Simplificada y Reducción de Cargas Administrativas
Uno de los mayores dolores de cabeza para cualquier emprendedor es la gestión administrativa. Papeles, seguros, ITV, revisiones, averías… ¡parece que nunca acaba! Y aquí es donde el renting se convierte en un auténtico héroe. Con el renting, la empresa que te lo ofrece se encarga de prácticamente todo. Olvídate de buscar el mejor seguro, de gestionar las reparaciones, de preocuparte por el mantenimiento o de pagar los impuestos de circulación. Todo eso viene incluido en tu cuota mensual. Esto libera una cantidad ingente de tiempo y recursos que, de otra manera, tu equipo (o tú mismo) tendríais que dedicar a tareas no productivas. Yo mismo he experimentado el alivio de no tener que preocuparme por estas cosas. Ese tiempo lo he podido invertir en buscar nuevos clientes, en desarrollar nuevas estrategias o simplemente, en disfrutar un poco más de mi tiempo libre, que también es importante para cualquier empresario. Esta simplificación no solo se traduce en un ahorro económico indirecto al liberar personal, sino también en una reducción del estrés y una mejora de la eficiencia operativa. ¡Es una inversión en tranquilidad!
Flota Siempre Actualizada y sin Preocupaciones de Mantenimiento
Mantener una flota de vehículos moderna y en perfecto estado es fundamental para la imagen de cualquier empresa y para la seguridad de tus empleados. Con el renting, esta preocupación desaparece. Al finalizar el contrato (generalmente entre 2 y 5 años), simplemente devuelves el vehículo y eliges uno nuevo, con la última tecnología, menos emisiones y, por supuesto, bajo garantía. Esto te permite tener acceso constante a vehículos eficientes y fiables sin tener que preocuparte por la obsolescencia o por los elevados costes de mantenimiento que surgen a medida que los coches envejecen. Piénsalo: no hay gastos imprevistos por grandes averías, no hay que pensar en la venta del coche usado, que siempre es un engorro y a menudo una pérdida. Mi experiencia me dice que estar siempre al día con los vehículos de empresa proyecta una imagen de modernidad y eficiencia que tus clientes valoran. Y para tus empleados, trabajar con vehículos seguros y cómodos es un factor motivador importantísimo. Es un win-win por donde lo mires.
El Futuro de la Movilidad Empresarial: Tendencias 2025
Vehículos Eléctricos e Híbridos: La Apuesta Sostenible
No es un secreto para nadie que el mundo está cambiando, y la movilidad empresarial no es una excepción. Para 2025, la tendencia hacia los vehículos eléctricos e híbridos enchufables es imparable, y esto tiene un impacto directo en las opciones de renting y leasing. Las empresas, cada vez más, están optando por estas alternativas no solo por compromiso medioambiental, sino también por las importantes ventajas fiscales y operativas que ofrecen. Los ayuntamientos están implementando zonas de bajas emisiones donde solo estos vehículos pueden circular libremente, y los gobiernos ofrecen ayudas y subvenciones para su adquisición o arrendamiento. De hecho, he notado un aumento significativo en las ofertas de renting de coches eléctricos, con condiciones muy atractivas que incluyen la instalación de puntos de recarga y bonificaciones por eficiencia. Es el momento perfecto para subirse al carro de la sostenibilidad y no solo reducir tu huella de carbono, sino también ahorrar en combustible y disfrutar de beneficios como el acceso sin restricciones a ciertas zonas urbanas. Mi consejo es que te informes bien sobre las ayudas disponibles en tu comunidad autónoma, ¡puedes llevarte una grata sorpresa!
Modelos Flexibles y Soluciones a Medida para tu Negocio
El mercado ha entendido que las empresas de hoy necesitan flexibilidad. Los contratos de renting y leasing ya no son tan rígidos como antes. Cada vez es más común encontrar opciones de “renting flexible” que te permiten ajustar la duración del contrato o el kilometraje según tus necesidades cambiantes. Esto es una bendición para startups o empresas con proyectos temporales, donde la previsión a largo plazo es más complicada. Además, están surgiendo soluciones de movilidad integrada que van más allá del simple coche, incluyendo scooters eléctricos, bicicletas e incluso patinetes para el personal, todo bajo un mismo paraguas de gestión. He visto cómo esto permite a las empresas optimizar al máximo sus recursos de transporte, adaptándose a las necesidades de cada empleado y cada tarea. La personalización es la clave. Ya no se trata solo de un coche, sino de una solución integral de movilidad que se ajusta como un guante a la dinámica de tu negocio. ¡El futuro es ahora y nos ofrece una libertad que antes era impensable!
Errores Comunes y Consejos para un Arrendamiento Exitoso
No Caigas en la Trampa: Evalúa Todas las Letras Pequeñas
Con la emoción de conseguir un buen coche o una ventaja fiscal, es fácil pasar por alto los detalles. Y creedme, he aprendido de mis propios errores. Mi primer contrato de renting parecía perfecto, pero no leí con atención las penalizaciones por exceso de kilometraje. ¡Casi me cuesta un ojo de la cara! Por eso, siempre insisto: la letra pequeña no está para adornar. Asegúrate de entender perfectamente el kilometraje anual incluido, las condiciones por si necesitas más, el tipo de seguro (todo riesgo con o sin franquicia), qué cubre el mantenimiento (a veces excluye neumáticos o piezas específicas), y las condiciones de devolución del vehículo. ¿Qué pasa si tiene pequeños arañazos? ¿Hay penalización? Estas cosas pueden marcar una gran diferencia en el coste final. No te quedes con dudas. Pregunta todo lo que necesites y si algo no te cuadra, ¡negocia! Las empresas de renting y leasing suelen ser más flexibles de lo que piensas, sobre todo si ven un cliente informado y decidido. La clave es ir siempre un paso por delante y anticipar cualquier posible sorpresa.
Consejos Pro-Activos para Optimizar tu Contrato
Una vez que decides cuál es la mejor opción para tu negocio, hay algunos trucos que he ido aprendiendo con los años para sacarle el máximo partido. Primero, si es posible, negocia un plazo de contrato que te permita renovar el vehículo justo antes de que empiece a dar problemas serios o a perder mucho valor. Para muchos coches, esto suele ser entre los 3 y 4 años. Segundo, no subestimes el poder de comparar ofertas. No te quedes con la primera que te llega. Utiliza comparadores online, visita varios concesionarios y no dudes en decir que tienes otras ofertas. La competencia es buena para el consumidor. Tercero, sé realista con tu kilometraje. Es mejor estimar un poco por encima y no quedarte corto, para evitar penalizaciones. Si ves que te vas a pasar, contacta a la empresa con antelación para renegociar las condiciones. Y un último consejo: mantén el vehículo en buen estado. Aunque no sea tuyo, un buen mantenimiento y cuidado te evitará problemas y cargos extra a la hora de la devolución. Al final, es tu imagen de marca la que está en juego.
| Característica | Renting para Empresas | Leasing para Empresas |
|---|---|---|
| Propiedad | El vehículo es propiedad de la empresa de renting. No hay opción de compra al final. | El vehículo es propiedad de la empresa de leasing (entidad financiera). Opción de compra al final del contrato. |
| Cuota Mensual | Cuota fija que incluye seguro, mantenimiento, impuestos, averías y a veces otros servicios. | Cuota fija que incluye amortización del capital y los intereses. No suele incluir seguro ni mantenimiento. |
| Ventajas Fiscales | Deducción del 100% de la cuota como gasto en IRPF/Impuesto de Sociedades. Deducción del IVA (hasta 100% si uso exclusivo profesional). | Deducción de la amortización del bien y los intereses en Impuesto de Sociedades. Deducción del IVA (hasta 100% si uso exclusivo profesional). |
| Balance Contable | No figura como activo en el balance de la empresa. Reduce el endeudamiento. | Figura como activo en el balance. Puede afectar el endeudamiento. |
| Flexibilidad | Alta. Permite renovar la flota con mayor frecuencia y acceso a modelos actuales. | Menor. Orientado a la adquisición final del bien. |
| Servicios Incluidos | Muy completo: seguro, mantenimiento, neumáticos, reparaciones, impuestos, gestión de multas, vehículo de sustitución. | Mínimos o nulos: usualmente solo la financiación del vehículo. Otros servicios son opcionales y aparte. |
| Idoneidad | Para empresas que buscan reducir costes operativos, renovar flota y externalizar la gestión. | Para empresas que buscan adquirir el vehículo a largo plazo y beneficiarse de la amortización fiscal. |
Maximizando tu Inversión: Consejos Prácticos del Experto
Negociación Inteligente: Consigue el Mejor Trato Posible
Aquí es donde mi vena de “cazador de ofertas” sale a relucir. No te conformes con la primera oferta que te pongan sobre la mesa. El mercado de renting y leasing es muy competitivo, y hay margen para negociar. Mi truco es siempre contactar con al menos tres o cuatro proveedores diferentes y dejarles claro que estás comparando. Cuando un comercial sabe que no eres su única opción, se esforzará más por ofrecerte mejores condiciones. Pregunta por promociones especiales, descuentos por volumen si necesitas varios vehículos, o si pueden incluir algún servicio extra que te interese. A veces, un pequeño detalle, como la inclusión de un segundo conductor en el seguro o la posibilidad de un kilometraje ligeramente superior, puede marcar una gran diferencia sin aumentar significativamente la cuota. Recuerdo una vez que conseguí que me incluyeran los neumáticos de invierno sin coste adicional simplemente por preguntar y mostrarles una oferta de la competencia. ¡No tengas miedo a pedir! Lo peor que te pueden decir es no, y lo mejor, es que te ahorras un buen dinero.
La Importancia de un Mantenimiento Preventivo y la Gestión Post-Contrato
Aunque en el renting el mantenimiento esté incluido, eso no significa que debas desentenderte por completo. Un buen mantenimiento preventivo sigue siendo crucial. Llevar el coche a las revisiones programadas a tiempo no solo garantiza tu seguridad, sino que también asegura que el vehículo se mantenga en las mejores condiciones, evitando posibles penalizaciones por desgaste excesivo al finalizar el contrato. Además, presta atención a la gestión post-contrato. Si has optado por leasing y quieres quedarte el coche, asegúrate de entender bien el valor residual y las opciones de financiación para esa compra final. Si es renting, la entrega del vehículo es un momento clave. Documéntalo todo con fotos y videos, y asegúrate de que el informe de tasación final sea justo. He escuchado historias de terror donde las empresas de renting han intentado cobrar por pequeños desperfectos que ya existían. Mi consejo: sé meticuloso, guarda todos los papeles y no dudes en impugnar si sientes que hay alguna injusticia. Un contrato bien cerrado es tan importante como un contrato bien iniciado.
글을 마치며
¡Y con esto, mis queridos emprendedores, llegamos al final de este viaje por el fascinante mundo del renting y el leasing! Espero de corazón que mi experiencia y estos consejos les sirvan de brújula para tomar la mejor decisión para su negocio. Recuerden, no hay una fórmula mágica universal, sino la opción que mejor se ajuste a la realidad de su empresa, a su flujo de caja y a sus proyecciones de futuro. Lo importante es estar bien informados, comparar y no tener miedo a preguntar. Una buena elección en este ámbito no solo aligerará su carga fiscal, sino que también les brindará la tranquilidad y la flexibilidad necesarias para seguir creciendo.
알아두면 쓸모 있는 정보
1. Antes de decidirte, analiza profundamente las necesidades de movilidad de tu empresa y cómo estas podrían cambiar a corto y medio plazo. La flexibilidad es clave.
2. Consulta siempre con un asesor fiscal de confianza. Las leyes pueden cambiar, y un buen profesional te ayudará a maximizar las ventajas fiscales específicas para tu caso.
3. Lee con lupa la letra pequeña de los contratos, prestando especial atención al kilometraje incluido, las coberturas del seguro y las condiciones de devolución del vehículo. ¡Evitarás sorpresas desagradables!
4. No te quedes con la primera oferta. Compara entre diferentes proveedores de renting y leasing. El mercado es competitivo, y negociar puede ahorrarte un buen dinero.
5. Considera el impacto en tu balance contable. El renting no figura como activo y no afecta tu capacidad de endeudamiento, mientras que el leasing sí lo hace.
중요 사항 정리
En resumen, tanto el renting como el leasing son excelentes herramientas para la movilidad empresarial, cada una con sus particularidades. El renting te ofrece una gestión despreocupada, con todos los servicios incluidos en una cuota fija y sin impacto en el balance, ideal para quienes buscan renovar su flota frecuentemente y externalizar servicios. Por otro lado, el leasing es una opción más orientada a la financiación y eventual adquisición del vehículo, permitiendo amortizaciones fiscales y la posibilidad de integrar el bien en los activos de la empresa a largo plazo. La elección óptima dependerá de tus objetivos estratégicos y financieros. ¡Infórmate, planifica y elige con cabeza!
Preguntas Frecuentes (FAQ) 📖
P: or otro lado, el leasing es más parecido a una hipoteca o un alquiler con opción a compra. Estás financiando el uso del vehículo con la idea de que, al final del contrato, si pagas un valor residual, el coche pase a ser tuyo. Aquí, la responsabilidad del mantenimiento y el seguro suele recaer en ti, aunque los gastos son deducibles. Es una opción perfecta si ya tienes claro que quieres adquirir el vehículo a largo plazo y prefieres capitalizar la inversión. Como lo veo yo, si buscas olvidarte de problemas y tener siempre un coche moderno sin ataduras, el renting es tu amigo. Si tu visión es a largo plazo y quieres ser el dueño al final, el leasing te da esa oportunidad. ¡Ambos son geniales, pero para propósitos diferentes!Q2: ¿Cuáles son las principales ventajas fiscales de optar por renting o leasing para un vehículo de empresa en España, especialmente considerando las tendencias para 2025?
A2: ¡Ah, la joya de la corona! Aquí es donde el bolsillo de tu empresa realmente sonríe, y te lo digo por experiencia propia. La gran ventaja fiscal, y esto es clave para 2025, es la deducción. En España, si el vehículo está afecto a la actividad de tu negocio (es decir, lo usas para trabajar), puedes deducirte una parte importante del IVA (Impuesto sobre el Valor Añadido) y del gasto en el Impuesto de Sociedades o I
R: PF, si eres autónomo. Con el renting, la cuota mensual se considera un gasto deducible al 100% en el Impuesto de Sociedades o IRPF, siempre y cuando se demuestre ese uso empresarial.
Además, puedes deducir hasta el 50% del IVA de esa cuota, y si puedes probar un uso 100% empresarial, ¡incluso más! Yo, al principio, pensaba que era complicado, pero una vez que lo entiendes, ves el ahorro.
Con el leasing, la deducción principal viene por la amortización del vehículo y los intereses de la financiación. También puedes deducir el IVA de las cuotas.
Para 2025, la tendencia es a favorecer aún más los vehículos eficientes y de bajas emisiones. Esto significa que optar por un coche híbrido o eléctrico mediante renting o leasing podría abrirte las puertas a aún más beneficios fiscales o ayudas adicionales, incentivando la renovación de flotas hacia opciones más sostenibles.
¡Es una estrategia win-win para tu empresa y para el planeta! Q3: Considerando el creciente enfoque en la sostenibilidad y los vehículos eléctricos, ¿qué opción (renting o leasing) es más adecuada para una empresa que busca actualizar su flota en 2025?
A3: ¡Excelente pregunta, y una muy, muy relevante para el futuro! Te confieso que es un tema que me apasiona porque el mundo está cambiando a una velocidad de vértigo, y la movilidad sostenible ya no es una opción, ¡es una necesidad!
Para 2025, con la constante evolución de la tecnología de vehículos eléctricos e híbridos, y la creciente preocupación por el medio ambiente, mi experiencia me dice que el renting se posiciona como una opción increíblemente atractiva.
¿Por qué? Pues porque te ofrece una flexibilidad brutal. Piensa en esto: los coches eléctricos mejoran año tras año.
Las autonomías aumentan, los tiempos de carga se reducen y aparecen nuevas prestaciones constantemente. Con un contrato de renting a corto o medio plazo, puedes tener acceso a la última tecnología sin el riesgo de que tu inversión se quede obsoleta en pocos años.
Cuando el contrato termina, simplemente cambias a un modelo más nuevo y eficiente. Es una manera de estar siempre a la vanguardia sin tener que desembolsar grandes sumas de dinero o preocuparte por la depreciación.
El leasing, si bien te permite adquirir el vehículo al final, podría atarte a una tecnología que, en unos años, quizá no sea la más avanzada. Si tu empresa quiere ser ágil, moderna y siempre tener lo último en movilidad sostenible, minimizando riesgos, yo personalmente me inclinaría por el renting.
¡Es como tener un pase VIP a la innovación constante!
